Algunos de los síntomas y complicaciones más serios, asociados una mala administración de una inyección y que ameritan atención por parte del personal de salud son:
- Aparición de inflamación infecciosa (celulitis o absceso) en la zona de punción: en ocasiones debido a la falta de higiene durante la administración.
- Lesión en los nervios periféricos: se produce por el roce de la punta de la aguja en una terminación nerviosa, pudiendo causar dolor y parálisis del miembro afectado (inyección intramuscular)
- Embolia gaseosa: burbuja de aire que circula por el torrente sanguíneo a manera de cuerpo extraño, la cual desestabiliza y pone en riesgo la vida del paciente, ya que afecta órganos como corazón, pulmones y cerebro. (inyección intravenosa)
- Extravasación medicamentosa: el medicamento se deposita fuera de los vasos; la zona se ve hinchada por varias horas. (inyección intravenosa)
- Enfisema: cuando una burbuja de aire es introducida en los tejidos. Tiende a reabsorberse espontáneamente (inyección subcutánea).
Existen otras complicaciones que también podrían llegar a necesitar valoración médica y no necesariamente se derivan de una mala administración, entre las cuales destacan:
- Hematomas: sucede por punción accidental de un vaso sanguíneo, depositándose la sangre en los tejidos circundantes. La zona se observa morada y luego verdosa hasta que desaparece.
- Dolor e irritación en la zona de la punción (resuelve espontáneamente en pocos días sin causar mayores complicaciones).
- Reacciones alérgicas locales o sistémicas por sensibilidad al principio activo o a los excipientes. Puede cursar con enrojecimiento de la piel, aparición de pápulas (urticaria), escozor prolongado (prurito), dificultad para respirar entre otros.
- Flebitis: inflamación de las paredes de la vena, originada por la acción local del medicamento (inyección intravenosa)
Espero haber podido ayudarte a aclarar tu duda. Quedo atenta a cualquier otra inquietud.