Los dolores de cabeza pueden cambiar de localización, de intensidad. Debe tratar de identificar los agentes que desencadenan los dolores para controlarlos y evitar así su frecuencia. En general ciertas comidas (lácteos, dulces, chocolate, quesos -en especial los madurados-, vino), cambios de clima o de iluminación, cansancio, estrés, mal dormir. Son tantos los desencadenantes que debe hacer una evaluación minuciosa de su caso. También es importante evaluar con su médico ya que existen causas que se pueden corregir, por ejemplo alteraciones visuales que pueden crear un dolor de cabeza por esfuerzo para enfocar.