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Antes de definir la edad es importante que diferencia el termino de sexualidad de genitalidad; genitalidad hace referencia a la diferencia entre los órganos sexuales entre hombre y mujer, y su función como órganos reproductores, y por ende esta relacionado con las relaciones sexuales.
Sexualidad es un término más amplio que debe ser manejado desde el momento de nacimiento del bebé, ya que este hace referencia a las normas sociales, a la crianza, creencias religiosas, a la forma en que el niño y niña se reconocen como individuos con un género específico, y cómo se relacionan con su familia, amigos y comunidad.
Es decir sexualidad se refiere a todas las normas de crianza que padres, cuidadores, y la comunidad enseñan al niño y niña promoviendo su adecuado crecimiento físico, psicológico e intelectual.
Por lo tanto la enseñanza de la sexualidad inicia desde los primeros años de vida, es importante explicar el respeto por el propio cuerpo y el de los demás, las normas sociales, y los límites que se deben establecer entre el contacto físico entre personas. Con respecto a las preguntas sobre el funcionamiento del cuerpo, relaciones sexuales, y funcionamiento de los órganos genitales, estas preguntas deben ser resueltas en el momento en que el niño exprese su duda o curiosidad (lo cual puede presentarse desde la primera infancia); es importante siempre hablar con los términos exactos del cuerpo y no inventar palabras, es decir: referirse al pene y vagina como tal, y no como "pajarito" o "florecita".
Muchos padres les preocupa que hablar sobre sexualidad induzca en sus hijos curiosidad sobre el tema y los lleve al inicio de relaciones sexuales a temprana edad; sin embargo, la evidencia médica y psicológica demuestra lo contrario, el hablar abiertamente de sexualidad, relaciones sexuales y genitalidad aumenta la confianza de los hijos con sus padres para hablar sobre estos temas sin tener temor a ser castigados, promueve el respeto por el mismo y los demás, favorece la creación de un proyecto de vida a largo plazo, fomenta la toma de mejores decisiones, y ayuda a que se los niños y niñas obtenga información confiable, y no se remitan a páginas de Internet o medios de comunicación que transmitan conceptos erróneos o que fomenten conductas sexuales de riesgo.
Tenga presente que este tipo de dudas puede expresarlas a su médico en las consultas de crecimiento y desarrollo, así como en las de control del adolescente. En estas consultas puede obtener mayor información y recomendaciones dirigidas específicamente a su hijo o hija.
Espero haberle orientado.
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