En más del 90% de los casos después del contacto la primoinfección puede pasar desapercibida, en el resto se presenta con un cuadro inflamatorio y con aparición de vesículas agrupadas en la zona genital. Generalmente dentro de los 3 a 14 días después del contacto, en ocasiones acompañado por síntomas generales como malestar general y fiebre. Después de haber sido infectado, pueden presentarse recidivas ya que el virus sigue latente en la persona.