Se pueden usar diferentes medicamentos para el tratamiento de las migrañas, cada uno de ellos tiene sus efectos terapéuticos y efectos secundarios. Estos varían según el medicamento usado. En el caso del Diclofenaco se puede producir como efecto secundario lo siguiente: Prurito, erupciones, dermatitis de contacto, dolor, exfoliación, parestesia, cefalea, mareo, retención de líquidos, calambres, dolor abdominal, diarrea, flatulencia, indigestión, náuseas, distensión abdominal, úlcera péptica/sangrado gastrointestinal, elevación de las ALT/AST. En menos del 1% de los pacientes se ha reportado: Agranulocitosis, anemia aplástica, anemia hemolítica, angioedema, ansiedad, asma, falla renal aguda, cambios visuales, cirrosis, convulsiones, depresión, desorientación, edema de labios y lengua, edema laríngeo, eosinofilia, eritema multiforme (hasta síndrome de Stevens-Johnson), erupción bullosa, fotosensibilidad, insomnio, irritabilidad, insuficiencia cardiaca congestiva, meningitis aséptica, necrosis hepática, nefritis intersticial, leucopenia, púrpura alérgica, púrpura, reacciones de anafilaxia, pesadillas, reacciones psicóticas, síndrome de Nicolau, síndrome nefrótico, trastornos de la memoria, vómito.