Más que recomendarle un remedio natural, en ocasiones cuando la diabetes este cerca de las metas metabólicas sin requerimiento de medicamento esa se puede controlar con una dieta adecuada y realizando actividad física mínimo 30 minutos 5 veces a la semana.
De lo contrario si los niveles de azúcar y hemoglobina glicosilada están lejos de las metas metabólicas, es recomendable consultar a su médico para evaluar la posibilidad terapéutica que más le convenga.
A continuación le dejo recomendaciones dietarías que le pueden servir.
Consuma cereales (arroz, trigo, avena, maíz, centeno, etc.) y sus productos elaborados como panes, palomitas de maíz y galletas integrales. Aportan hidratos de carbono de absorción lenta y fibra.
Evite, no obstante, la pastelería y la bollería (bizcochos, magdalenas, roscones, croisants, galletas no integrales).
Consuma a diario aceite vegetal preferiblemente de oliva, aunque también puede ser de girasol o maíz y evite para cocinar la manteca de cerdo, la mantequilla y los aceites de palma o de coco.
Coma a diario verduras y hortalizas, tanto crudas como cocidas.
Coma frutas frescas, en vez de zumos de fruta. Evite la fruta en conserva o en almíbar y las compotas y mermeladas excepto las elaboradas expresamente para diabéticos que no contienen azúcar.
Consuma todo tipo de legumbres ( lentejas, garbanzos, habichuelas, etc.) que aportan una cantidad considerable de fibra.
En cuanto a la carne lo más aconsejable en este caso es tomar pollo o pavo sin piel, conejo, perdiz, codorniz, paloma. Evite las carnes grasas, los embutidos, las vísceras, los salazones y los ahumados.
En cuanto al pescado puede tomar tanto los considerados blancos como azules.
Tome leche y yogurt desnatados. Evite la leche entera, los yogures enteros, los quesos curados (manchegos, bola, emmental), la nata que aportan más grasa.
No tome azúcar común. Si es que está acostumbrado a añadir azúcar a sus bebidas, use algún edulcorante artificial que no tenga calorías, como ser aspartamo o sacarina.
Evite la miel, la jalea, los caramelos, las gelatinas dulces y los pasteles dulces.
Evite las bebidas como gaseosas, colas, zumos comercializados y otros refrescos que suelen contener bastante azúcar.
Evite las bebidas alcohólicas ya que el alcohol reduce los niveles de azúcar en la sangre e interfiere con el correcto control de los niveles de insulina.