Si ha tomado antes algún tratamiento para la gastritis, puede intentar tomándolo unos 5 o 10 minutos antes de tomar la fluoxetina para evitar disminuir el efecto. Es muy probable que las molestias continúen pero en menor intensidad, y con los meses logran controlarse.
La fluoxetina es un medicamento con el cual el cuerpo a veces presenta dificultad para adaptarse, por lo que muchas veces se trata de paciencia. En caso tal de que se torne intolerable, consulte con su médico la posibilidad de un ajuste, pero sin suspender el tratamiento antes de esto, para evitar complicaciones.