Los ganglios que se encuentran en el cuello, usualmente se inflaman durante una infección que afecte las vías respiratorias altas (Resfriado, amigdalitis, infecciones del oído), la boca (úlceras bucales, gingivitis, absesos dentales), o infecciones de la piel de cara y cuello. Y es normal que una vez pasa la causa, vuelvan a desinflamarse. Si este es el caso, no hay de que preocuparse.
Si los ganglios se inflaman sin causa aparente, y permanecen en ese estado, se debe consultar para hacer análisis adicionales que permitan establecer la causa.