Es normal que si las costras fueron retiradas manualmente, la piel bajo ellas esté un poco rosa, y con el paso de los días debe retomar el color de la piel normal. Es importante que para evitar las cicatrices, no manipules las lesiones, es decir, deja que las lesiones se vuelvan costras ellas solas, y que se desprendan cuando sea su momento, ya que intentar eliminarlas antes podría lastimar la piel y favorecer la aparición de cicatrices.
También debes evitar asolearte, pues esto podría hiperpigmentar la piel donde se formaron las lesiones, y dejarte con manchas. Luego de haber pasado por esta fase, debes utilizar bloqueador solar todos los días para cuidar que no vayan a salir manchas aún después de que las costras se hayan caído.