Es probable que no se trate de acné, sino de otro tipo de condición conocida comúnmente como fuego labial, la cual es producida por la infección con el virus del herpes simple tipo 1. Este tipo de infección genera la aparición de pequeñas ampollas que contienen líquido dentro y que al explotarse, generan llagas. Debido a que suelen ser autolimitadas, es decir, se resuelven solas, no siempre es necesario utilizar medicamentos para tratarlas.
Si estás presentando acné al rededor de la boca (y no en el resto del rostro), y este deja costras amarillas, podrías presentar impétigo. El impétigo también forma ampollas que revientan y se convierten en llagas, y supuran una secreción amarillenta que se convierte en costras. Este tipo de infección requiere tratamiento con antibióticos y por eso debes consultar con tu médico.
Si por otro lado, tienes acné al rededor de la boca y también en el resto del rostro, podrías tener acné vulgar, que es muy común en la adolescencia, y dependiendo de su severidad, puede requerir tratamiento médico o no.
En todo caso, si lo que estás presentando te es muy molesto, puedes consultar con tu médico para que este determine si es posible recetarte algún tratamiento que mejore la apariencia de tu piel.