Podrías tener desde una contusión de tejidos blandos, es decir, inflamación del músculo y los tendones que se encuentran en esta área, hasta fractura de la rótula, tibia o fémur, dependiendo de la intensidad de la caída y el mecanismo del trauma.
Si sufriste una caída, y el dolor no es tan intenso, y puedes movilizar la pierna, es poco probable que se encuentre fracturada. En este caso con analgésicos, calor y frio local, el dolor deberá disminuir.