La anhedonia por lo general no es congénita ni se nace con la misma.
Puede desarrollarse junto con episodios depresivos, como la sensación de no disfrutar placer.
En caso de que tengas síntomas de tristeza y anhedonia que comprometa tus actividades diarias, es importante que visites a tu médico para definir si requieres tratamiento con medicamento y terapias adicionales.
Espero haberte orientado.