No, es normal que perciba zonas del cuerpo más calientes que otras sin que indique fiebre o una condición anormal, más aún en climas cálidos. Por ello no es necesario acudir al médico.
Si quiere descartar la presencia de fiebre, lo mejor es realizar una medición de la temperatura mediante el uso del termómetro. Una temperatura superior de 38ºC indicaría fiebre.
Signos de alarma para acudir a urgencias incluyen: irritabilidad, no come o todo lo vomita, respira con dificultad, fiebre persistente, convulsiones.