Esto no es peligroso, el sonido intestinal no representa una situación de riesgo, pero si se encuentra asociado a malestar, irritabilidad o incomodidad, es posible que se trate de gases o cólicos, los cuales pueden estar facilitados por el tipo de alimentación.
Recuerde que hasta los seis meses de vida la alimentación debería ser exclusiva con lactancia materna sin incluir otras bebidas o alimentos. La introducción de una fórmula láctea predispone o empeora la formación de gases y otros problemas gastrointestinales.
Puede realizar masajes en el abdomen en el sentido de las manecillas del reloj, movimientos con las piernas sobre el abdomen, suaves movimientos de balanceo y palmadas en la espalda posterior a finalizar cada comida.
La ranitidina puede generar alteraciones del ritmo intestinal y podría ser una de las causas de las molestias también. Tenga en cuenta que el reflujo es normal en todos los niños hasta los 2 años de edad aproximadamente, y no es necesario un manejo específico, salvo la presencia de complicaciones secundarias (como retraso del crecimiento o episodios de obstrucción respiratoria); es recomendable dialogar con su médico para evaluar la necesidad de continuar el manejo por largo tiempo.
Finalmente, le aconsejo iniciar un proceso de relactancia, es decir mantener la lactancia materna de forma exclusiva, esto representa beneficios de salud para su hijo y reduce la aparición de molestias gastrointestinales. Puede apoyarse de promotores y asesores de lactancia materna.