En los asmáticos es muy importante el ejercicio ya que al mejorar la capacidad pulmonar, se suben las endorfinas, permite socializar al asmático, etc. En general, se debe estar bien controlado del Asma para hacer ejercicio, una crisis se suscita cuando no se está bien controlado. Sirven o son adecuados los ejercicios en ambientes húmedos como la natación, atletismo, relevos y evitar deportes exigentes como baloncesto, fútbol; siempre hacer un buen calentamiento, no hacer ejercicios muy intensos ni de gran exigencia. En los Juegos Olímpicos de Barcelona (1992), entre el 8 y el 12% de los competidores eran asmáticos.