Para iniciar un cambio en la alimentación que nos permita elevar el colesterol HDL (el bueno) debemos saber que las grasas trans lo reducen mientras que los ácido grasos monoinsaturados lo elevan.
Para incrementar el colesterol bueno es recomendable ingerir a diario un puñado de frutos secos (aní, nueces o almendras sin sal), incluir aceite de oliva o aceite de girasol sin someter a cocción (para aderezar), carne de cerdo, 5 aceitunas o ¼ de aguacate por día para obtener una cuota de grasas saludables.
Es fundamental reducir la ingesta de galletas, snacks, frituras y la margarina porque son fuente de grasas trans.
El colesterol bueno en sangre representa un protector contra las enfermedades cardiovasculares, por eso, sus valores inferiores a 40 mg, deben ser una alerta para actuar a tiempo y elevarlo.
Espero haber podido orientarte en tu inquietud, no dudes en volver a escribir si tienes otra pregunta.