Si la persona no padece ninguna condición específica que amerite una regulación de la dieta como en los casos de hipertensión arterial o diabetes. No es necesaria una dieta específica.
En general, mientras sea tolerado puede alimentarse con la mayor parte de grupos alimenticios de forma moderada. Es posible que la tolerancia a lácteos, a ciertas verduras o leguminosas puede estar reducida.
En términos generales debe mantener una alimentación balanceada rica en frutas y verduras, acompañada de una buena hidratación junto con una adecuada ingesta de fibra. En lo posible, debería acompañar su alimentación de actividad física regular.