No se recomiendo el consumo conjunto de alcohol en personas con tratamiento farmacológico crónico, así sea “horas después” ya que el alcohol incrementa, en este caso, la toxicidad de la metformina, haciendo más posible se presenten complicaciones como insuficiencia renal aguda y acidosis láctica.
Además, el consumo de alcohol altera los niveles de glucosa. Sobre todo, si se hace en grandes cantidades. Le recomiende que consulte con su médico de cabecera sobre qué bebidas puede incluir en su dieta y en qué cantidades.
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