Luego de lesiones óseas tales como fisuras o fracturas, se puede regresar al trabajo una semana después de la lesión, siempre y cuando, el trabajo no requiera caminar bastante, estar de pie o usar el pie; de lo contrario, se debe esperar hasta que los síntomas permitan realizar su trabajo de manera cómoda y segura.
Los ejercicios del dedo del pie, el tobillo y el estiramiento suave de la pantorrilla generalmente se inician de tres a cuatro semanas después de la lesión (o uno o dos días después de la extracción del yeso, si se realizó un yeso; luego se inician los ejercicios de fortalecimiento y el caminar suave; posteriormente se puede caminar rápido o correr suavemente una vez que la fractura demuestra curación y caminar ya no es doloroso. Las actividades pueden avanzar gradualmente a medida que se toleren desde allí, por lo que la recuperación depende de cada paciente.
En promedio se espera que para realizar deportes de contacto y actividad física extenuante, se deben esperar en promedio 15 semanas para aquellas fracturas mínimamente desplazadas, y 23 semanas para aquellos con fracturas desplazadas.
Por lo anterior, si ya pasó un año desde tu lesión lo mas probable es que ya tengas una recuperación completa, pero en caso de presentar molestias o dolor con la actividad, te recomiendo que acudas a tu médico para que valore si el hueso ya sano de manera adecuada.
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