Estas molestias pueden estar relacionadas con alteraciones del nervio trigémino, pueden ser un síntoma de estrés, ansiedad, fatiga física o reposo inadecuado.
La tomografía no es un examen que evalúe este componente neurológico, por lo que aunque sea normal no descarta las alteraciones mencionadas.
Es recomendable que mantenga la calma, espacios de reposo adecuado y una alimentación balanceada junto ejercicio regular. Asimismo, acudir a control médico permitirá analizar individualmente su caso y determinar estrategias de seguimiento y manejo apropiadas.