Es posible que se relacione con algunas condiciones climáticas, en su caso por el uso de estufa calentadora, que puede incrementar la temperatura de la habitación y facilitar la sudoración en zonas como la nuca por la grasa normal de dicha zona, el contacto con almohadas, los pliegues que puedan haber.
Es posible que estas molestias de forma aislada y modesta no representen un peligro o alteración en su salud. Puede alejarse un poco de la calefacción, reducir las cobijas, mantener un peso ideal, evitar el sobrepeso.
Si las molestias persisten o se asocian a fiebre, pérdida de peso o ansiedad importante, lo mejor sería acudir a control médico para estudiar otras condiciones.