Pierdes los efectos que están produciendo el medicamento en tu cuerpo.
Si suspendes el tratamiento debe ser de manera gradual, durante al menos 1 semana porque si lo suspendes de manera abrupta puedes presentar síntomas como: ansiedad, diarrea, sudoración excesiva, dolor de cabeza, insomnio y nauseas.
Recuerda que los medicamentos producen mejor control de los síntomas sólo si se toman según prescritos por el médico, por lo cual no debes suspender tu medicación al menos que así lo indique, por lo cual debes asistir a consulta primero.