Es claro un marcado componente de ansiedad en su relato, que ante los distintos y múltiples estudios y consultas médicas sin alteraciones; sugieren que sus síntomas son una manifestación de la ansiedad.
Es importante que adquiera consciencia de esta situación, la ansiedad no quiere decir que se está inventando los síntomas ni que deje de percibir las molestias. Lo que implica es que existe un componente psicológico o emocional de base que favorece su aparición, y que al mejorar, habrá un control de los síntomas.
Los exámenes realizados pueden conservar su validez por muchos años en ausencia de una condición médica específica o situación que condicione un cambio o mayor riesgo para su corazón, por lo que los exámenes de hace 4 meses seguirían siendo válidos en su caso sin necesidad de repetirlos.
La fiabilidad de un examen puede variar dependiendo del tipo de examen y la condición que se busque, sin embargo, en términos generales es improbable que presente todos los exámenes normales (realizados en múltiples ocasiones) y curse con una anomalía o enfermedad grave o significativa, sin que esta se manifieste.
Para el paciente, puede ser en ocasiones difícil diferenciar un ataque de pánico de un ataque cardíaco, pero suelen haber algunas pistas: la situación en la que se desencadena, los antecedentes médicos, los síntomas acompañantes, la intensidad y duración de los síntomas.
Cuando esta situación se presenta, lo más importante será descartar una alteración orgánica (problemas del corazón), y según el contexto el médico podrá con mayor o menor facilidad realizar esta diferencia.
Es recomendable que logre un control de la sintomatología ansiosa, ya que esta puede empeorar y generar mayor limitación en su vida diaria. No dude en solicitar ayuda.
En caso de que la ansiedad se torne insoportable puedes acudir a urgencias, la salud y bienestar mental, también son importantes.