Si tu bebé presenta fiebre, que no mejora con acetaminofén y tiene ruidos pulmonares, lo mejor que puedes hacer es llevarla a un servicio de urgencias o con un pediatra de forma inmediata. Debes estar muy atenta a los signos de alarma pues ellos son los que nos hablan de la necesidad de llevar a tu chiquita:
1. Dificultad respiratoria: Aleteo nasal, que se ponga azul al rededor de los labios, respiración demasiado rápida, hundimiento de las costillas, relación abdomen - barriga como en balancín, uso o marcación de músculos del cuello.
2. Fiebre mayor a 38.3° que no mejora con la administración de acetaminofén
3. No recibe alimentos
4. Está bajando de peso de forma rápida
5. Lo encuentras deshidratado ( ojos hundidos, saliva espesa y babas filantes, boca seca, toma líquidos de forma ávida, piel acartonada)
6. Tiene taquicardia
7. Está irritable e inconsolable.