Hay una serie de factores que influyen en la pérdida del cabello. Algunos de ellos, como la genética, no se pueden modificar. Sin embargo, existen otros factores que son modificables y se asocian a la pérdida del cabello. Estos últimos incluyen la dieta, el cuidado de tu cabello, consumo de sustancias y hábitos cotidianos.
Para solucionarlo, puedes intentar utilizar productos comerciales como el champús sin sal o algunos otros que promueven el crecimiento y fortalecimiento del cabello y folículo piloso. Es importante que el uso de productos vaya acompañado de una dieta balanceada, en la que evites los alimentos procesados o comidas rápidas, fumar y beber alcohol. Puedes ingerir Biotin, un complejo vitamínico que ayudará a mejorar la apariencia de tu cabello y le brindara fuerza al folículo piloso, disminuyendo la pérdida del cabello. El uso de productos comerciales como el minoxidil no se recomienda pues no tiene los estudios suficientes y además no soluciona el problema de base; únicamente funciona durante el tiempo que lo apliques, pero si lo suspendes pierde su efecto de inmediato.
Si la pérdida de cabello es muy abundante y persiste pese a las recomendaciones anteriores, puedes consultar con tu médico de cabecera o asesorarte por un dermatólogo. Ellos podrán brindarte un manejo mas específico.