Podría ser cualquiera de las dos, más posiblemente un ganglio linfático; si este disminuye su tamaño en las próximas semanas no habría de qué preocuparse, pero si persiste inflamado, genera dolor o continúa creciendo, será importante acudir a la consulta médica presencial para revisarte en detalle y determinar la necesidad de hacer exámenes complementarios.
Por ahora, como te dije, no es algo de qué preocuparse, pero si presta atención a los cambios que la bola presente durante las próximas semanas.
Espero haberte orientado.