Se puede considerar normal si no presenta distensión ni irritabilidad o fiebre, si no hay presencia de vómito y si las deposiciones posteriores son de consistencia blanda o semilíquida como normalmente las realiza un lactante. En caso de que se acompañen de estos síntomas se debe consultar de forma rápida.
Si por el contrario el único síntomas presente en la ausencia de deposición en los 3 días, puedes esperar con paciencia, poco a poco se irá regulando su hábito intestinal.
En los lactantes, es normal que se presente la ausencia de deposición por un par de días, sus deposiciones pueden no ser diarias y no tener un horario fijo ni un número "normal" de ellas, esto se debe a que su aparato neurológico y digestivo aun no ha madurado completamente por lo que no funciona de forma regular como en un niño más grande o un adulto.
Si presenta dolor o cólico puedes ayudarle con masaje suave alrededor de su ombligo en sentido de las manecillas del reloj y que tu alimentación sea sana con pocos lácteos, no refrescos ni gaseosas, manteniendo una dieta rica en fibra.
Si persisten los síntomas y a pesar de que pasen los meses la condiciñon no mejora, debes acudir a su pediatra.
De todas maneras las deposiciones deben ser muy blandas o semilíquidas aunque hayan tardado varios días en presentarlas, si la deposición posterior es de consistencia dura y la hace con dificultad, puede que esté cursando con estreñimiento lo cual sí requeriría atención pediátrica.