Generalmente respecto a la edad, un embarazo puede considerarse de riesgo medio (no alto) cuando se tienen menos de 16 años o más de 38. Respecto al periodo intergenésico (periodo entre el nacimiento de un hijo y un nuevo embarazo), también se considera de riesgo medio (no alto) tener un periodo intergenésico menor a 12 meses, siendo lo recomendado esperar al menos 18 meses.
Los embarazos de alto riesgo son aquellos en los que la madre cursa con diabetes gestacional, anemia grave, cardiopatias moderadas, embarazo gemelar, obesidad mórbida, preeclampsia leve, infecciones como sífilis, hepatitis B, VIH, rubeola, citomegalovirus, entre otros.
Los embarazos de muy alto riesgo son los que se presentan con amenaza de parto pretermino, cardiopatias severas, diabetes pregestacional, drogadicción, alcoholismo, malformación fetal confirmada, muerte fetal confirmada, incompetencia cervical, retraso del crecimiento intrauterino, placenta previa, preeclampsia grave, rotura prematura de membranas, entre otros.