Usualmente cuando hay lesiones de ese tipo los tejidos nunca vuelven a ser como antes, de manera que los huesos no van a resistir de igual forma que lo hacían antes del accidente. Es posible que puedas volver a jugar, pero tienes un riesgo alto de lesionarte nuevamente. Lo ideal es que consultes con el cirujano que te operó, realice una evaluación de la extremidad, si es posible tomar imágenes (Radiografía) nuevamente y con base en esos elementos, te podrá decir con mayor certeza si es posible jugar o no.
Desde mi punto de vista, creería que es posible jugar, pero muy esporádicamente, con sumo cuidado y evitando impactos fuertes. No obstante, como te dije el cirujano tratante te dará esa respuesta teniendo en cuenta la gravedad de la lesión y cómo se encuentre en el momento.