Desde que usted sale de su operación puede retomar su dieta normal, dependiendo claro esta de si su médico tratante le dejó alguna observación especial, de no ser así, usted puede consumir lo que desee de la manera en la que así lo prefiera, no existe una dieta específica para su tipo de cirugía. Es recomendable en todo caso que su dieta consista en una alimentación balanceada.
Lo mejor es una alimentación completa, que incluya altas cantidades de fibra y carbohidratos, con proteínas variadas y bajos contenidos de alimentos procesados, azúcares y grasas. Debe consumir frutas y vegetales frescos, cereales, legumbres, carnes magras, pollo y pescado, así como evitar los alimentos de pastelería, los alimentos muy condimentados, fritos, con muchas salsas y muy procesados, como los embutidos.
Es importante que a pesar que su operación compromete la pierna, no pase todo el tiempo en reposo en cama, ya que esto podría ser contraproducente para su salud. Es recomendable que pregunte a su médico tratante cuando le recomienda comenzar la deambulación, ya que esto ayudará a su circulación y a su proceso de curación.