No aparenta una situación de gravedad, estos síntomas pueden ser sugestivos de cefalea tensional, que puede acompañarse de episodios de tensión muscular, por ejemplo a nivel del cuello.
El manejo inicial incluye analgésicos simples, aplicación de compresas tibias en la zona de tensión muscular y estrategias de relajación y manejo de factores relacionados como el estrés o ansiedad.
Es recomendable que ante episodios severos o de difícil manejo, acuda a control médico para ampliar las características del cuadro y determinar conductas adicionales.
Acuda a urgencias en caso de dolor severo que no mejora, alteraciones de la movilidad o sensibilidad, vómito persistente, rigidez de nuca.