Los trastornos del sueño generalmente están relacionados con situaciones externas: estrés, alta carga laboral o académica, discusiones interpersonales o familiares, consumo excesivo de cafeína, chocolate o bebidas energizantes.
La primera recomendación es evitar estas situaciones. Realice actividad física continua y progresiva, evite consumir abundantes alimentos en horas de la tarde, trate de bañarse antes de acostarse, use ropa cómoda y mantenga un ambiente tranquilo. Evite el uso de electrodomésticos (televisor, celular) en la habitación.
Si persisten los síntomas consulte a su médico para valoración y estudio complementario.