Las pruebas de embarazo en sangre miden la cantidad de hormona gonadotropina corionica humana (hCG), la cual puede ser detectada en la sangre desde los 10 días de haber tenido la relación sexual, y los resultados de este tipo de prueba son considerados confiables si se realizan después del periodo de tiempo recomendado.
Con una prueba de embarazo en sangre a los 64 días de la relación sexual, se excluye la posibilidad de estar en embarazo, sin embargo, si desde que tuvo la relación sexual no ha presentado su menstruación (han pasado dos meses) entonces sería recomendable que acuda personalmente con su médico, para evaluar las posibles alteraciones que se puedan estar dando con su ciclo.