Posterior a la toma de la sertralina pueden percibirse síntomas de temblor (las manos y los pies no se quedan quietos), sensación de intranquilidad, sequedad de la boca, dolor de cabeza y disminución del deseo sexual, entre otros.
Para su toma esta indicado iniciar dosis bajas y hacer el ascenso de la dosis paulatinamente, hasta lograr el control de los síntomas de disconfort. Es importante que tengas presente, para lograr la estabilización de los síntomas por los cuales hayan indicado la toma de la sertralina, mínimo debe haber pasado 1 mes del consumo consecutivo de la medicación.
Sin embargo de persistir la molestia, que genere una incomodidad aumentada, constante, que no te permita realizar tus actividades del común, es indicación comentarle a tu médico tratante para evaluar la necesidad del ajuste de la dosis o medicación, y sería bueno una revaloración médica para que aclaren esas dudas respecto a los efectos de estos medicamentos, y te brinde más tranquilidad durante tu tratamiento.