La curación de un linfoma (tumor derivado de las células de la defensa) depende fundamentalmente de varios aspectos.
1. Estadío del tumor (entre más localizaciones hayan, menor posiblidad de curación)
2. Tipo de tumor, ya que existen tumores más agresivos y de peor pronóstico que otros (Por ej: Linfoma folicular Vs Linfoma de Burkitt)
3. Respuesta al tratamiento propuesto (Un tumor que responde rápidamente al tratamiento tiene mejor posibilidad de curación)
4. Presencia de metástasis (enfermedad extendida), lo cual disminuye la posibilidad de curación.
5. Factores del paciente (estado anímico, nutricional, estado general, grado de dependencia, entre otros).
No obstante cada paciente debe ser valorado individualmente en sus tres esferas (biológica, psicológica, social) para establecer el tratamiento que más se ajuste a sus necesidades, así como el pronóstico propio derivado de su enfermedad.