Es posible el uso de medicación simple de venta libre como el acetaminofén o los antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno, naproxeno, diclofenaco, entre otros. Preferiblemente por horario pero por tiempos cortos no mayores a una semana.
Puede emplear medios físicos como alternar calor y frío en la muñeca afectada o usar una férula para inmovilizar la articulación y realizar suaves estiramientos.
Si el dolor persiste o agrava deberá acudir a control médico para complementar la valoración.