Si hace referencia a disfonía, esta puede originarse por distintas causas como: infecciones virales, sobreesfuerzo, nódulos o lesiones en las cuerdas vocales, irritación por exposición a contaminantes como el humo o el ácido (reflujo gastroesofágico).
En principio no existe una relación directa entre la disfonía y el estómago. Pero ante cuadros de enfermedad acidopéptica como el reflujo gastroesofágico el contenido ácido puede generar irritación laríngea y conducir a disfonía.