Actualmente, los estudios sugieren que no hay beneficios en la reducción del riesgo de fractura con la ingesta de suplementos minerales o vitaminas. Pero podría ensayar incrementando el consumo de calcio en su alimentación, por ejemplo con leche u otros productos lácteos de forma directa. Del mismo modo, podría sugerirse un aporte de vitamina D.
Acompañando esto de actividad física controlada para fortalecer sus músculos que estimularán el fortalecimiento óseo. Y seguir las recomendaciones médicas sobre el consumo de medicamentos para manejo de las comorbilidades.