No se suelen fabricar jabones específicos para la higiene íntima masculina y aún si existiesen solo deberían usarse bajo indicación médica. El lavado diario con agua y jabón suele ser suficiente para mantener una higiene adecuada.
Cuando existen infecciones suele bastar con una adecuada higiene y lavado con solución fisiológica o manzanilla amarga por un par de semanas mientras los síntomas pasan pero cuando esto no sucede es necesaria la intervención médica para la indicación de cremas o ungüentos que contengan antibióticos-antimicóticos-esteroides o una terapia farmacológica oral adecuada.