El jamón serrano y los embutidos tienen contenido proteico y de sal, y como quizá ya usted sepa tanto la sal como las proteínas se encuentran restringidas en los pacientes con enfermedad renal; en ciertos estadíos podría permitirse el consumo de algunas lonchas o porciones pequeñas, dado que la presentación de estos productos lo facilita.
Ahora, bien vale la pena anotar que entre los productos embutidos, hay una gran variedad, y algunos contienen más sal que otros, algunas presentaciones son más ricas en proteínas que otras, etc. De manera que, por ejemplo, el jamón york suele permitirse para un consumo frecuente, y el jamón serrano para un consumo ocasional. En ambos casos se debe tener control de la cantidad que se come.
Mi recomendación es que siempre revise la información nutricional de lo que va a a comer, tenga en cuenta que las proteínas deben ir a 0,75 a 1 gramo por kilo de su peso y el consumo de sal no debería supera 1 gramo, ambas recomendaciones aplican para un período de 24 horas, es decir un día. La restricción puede ser menor o mayor en función del grado de insuficiencia renal que tenga, de manera que este aspecto se recomienda dialogarlo con su médico tratante.