Un bebé debe recibir leche materna exclusiva por lo menos durante los primeros 6 meses de vida, ojalá tenga lactancia hasta los 2 años de edad para que reciba todos los beneficios de la leche materna. A partir de los 6 meses, cuando ya empieza el proceso de dentición, se pueden empezar a introducir de forma gradual otros alimentos para suplementar los nutrientes que recibe de la leche materna.
La OMS recomienda que los lactantes empiecen a recibir alimentos complementarios a los 6 meses. Primero unas 2 o 3 veces al día (entre los 6 y los 8 meses), después unas 3 o 4 veces al día (entre los 9 los 11 meses) y luego añadiéndoles aperitivos nutritivos 1 o 2 veces al día (entre los 12 y 24 meses) según se desee.
En esta etapa se pueden empezar a introducir las frutas y cereales en papillas y compotas, alimentos ricos en hierro como algunos granos en puré. Se deben evitar alimentos alergénicos como los derivados de la leche de vaca, las fresas u otras frutas que en la familia sean conocidas como alergénicas -incluidos los cítricos-.