La punzada en la cabeza es secundaria a la contracción de los músculos de la parte posterior del cuello, para evitar estas punzadas es necesario liberar la tensión de los músculos, es decir con terapia local con calor, o de lo contrario acudir a terapia física con el mismo objetivo de liberar la presión, si hay dolor de cabeza asociado el tratamiento sería con antiinflamatorios. Y cuando el dolor no mejora o la tensión no mejora con ninguna medida, se pueden hacer infiltraciones