Si efectivamente, podría tratarse de una infección urinaria. Uno de los signos que orientan a la presencia de una infección del tracto urinario es precisamente, el aumento en la frecuencia de las micciones (orina), especialmente si estas son escasas. Sin embargo, por lo general puede ir acompañado de otros signos y síntomas como:
- Sensación de ardor al orinar
- Orina de aspecto turbio
- Presencia de sangre en orina
- Orina con olor fuerte
- Deseo continuo, doloroso e ineficaz de orinar (tenesmo vesical).
- Molestia o Dolor Pelvico, especialmente en las mujeres.
Incluso en algunos casos puede cursar con fiebre, escalofríos, dolor en la fosa lumbar y nauseas, lo que por lo general indica que la infección ascendió hasta alcanzar los riñones; Si presentas alguno de estos últimos te recomiendo acudir al servicio de urgencias mas cercano. En caso contrario te recomiendo realizar un uroanalisis (examen de orina) y acudir a consulta con tu medico general para confirmar o descartar la presencia de infección urinaria, y en caso de ser necesario instaurar un tratamiento adecuado.
La principal causa que genera las infecciones en la orina es el ascenso de las bacterias desde la uretra hacia la vejiga (en aprox. 80% de los casos), muchas veces por mala higiene a nivel genital; sin embargo también puede producirse posterior a una actividad sexual de riesgo, por obstrucción en cualquier punto de la vía urinaria y por una condición conocida como reflujo vesico-ureteral. Asimismo, el uso de compuestos espermicidas con un diafragma, o de preservativos recubiertos de espermicida, modifica la flora bacteriana normal de la zona genitourinaria, y se ha asociado a un aumento de infecciones urinarias. De modo que como puedes ver, la génesis de la infección de las vías urinarias no se relaciona con un mal funcionamiento renal.
Otras causas de polaquiuria (aumento en la frecuencia miccional y de escasa cantidad) incluyen el uso de algunos medicamentos como la difenhidramina. También puede presentarse como síntoma de irritaciones de órganos adyacentes al tracto urinario como apendicitis, vulvovaginitis, endometritis o gastroenteritis, sin embargo estos por lo general cursan con sintomatología propia del cuadro, adicional a el aumento de la frecuencia miccional. También en ocasiones se genera por la existencia de un tumor benigno o maligno próximo a la vejiga que la comprima, como por ejemplo los tumores de ovario. En resumen, lo más frecuente es que este signo clínico sea debido a enfermedades originarias de las vías urinarias, sin embargo existen otras causas que pueden llegar a originarlo y deben tomarse en cuenta a la hora de realizar un diagnostico diferencial.
Espero haberte ayudado con la respuesta