Es probable que la sangre se coagule dentro del tubo de ensayo y la muestra se pierda. Esta muestra no te ayudará a saber cuál es tu hematocrito. Cuando vas a un laboratorio, a tomarte estudios de sangre, los tubos de ensayo, dependiendo el fin de la muestra, tienen diferentes componentes para que la muestra no se dañe, para que los glóbulos no se rompan y para que la sangre no se coagule y pueda ser procesada.
Para saber el valor del hematocrito de una muestra hay dos formas. La primera y más utilizada en este momento, es por medio de una máquina que hace la identificación de la muestra y cuenta los glóbulos rojos y los glóbulos blancos generando un valor muy acertado. La otra es por medio de microscopía, haciendo una medición de la cantidad de sangre tomada, toca separar los glóbulos blancos de los rojos y a su vez calcular cuantos hay por milímetro cúbico y aproximar el valor por matemáticas. Es difícil que tu misma llegues a obtener dicho resultado sola. Por tanto, si deseas saber cuál es tu valor de hematocrito, lo ideal es que pidas una cita con médico general para que te ordene el cuadro hemático o que te lo realices de forma particular y esperes a que el laboratorio procese la muestra.