No hay un tratamiento específico para tener una próstata saludable. Se debe realizar el antígeno prostático anualmente como examen de pesquisa a partir de los 50 años o desde los 45 años si se tiene un familiar en primer grado con cáncer de próstata. Comer saludablemente, realizar actividad física y mantener relaciones sexuales o masturbarse ayudan a prevenir alteraciones en la próstata.