No necesariamente. Pero como todo en exceso es malo, la razón es que puede que después te cueste disfrutar una relación sexual convencional y que te cuentes alcanzar el orgasmo.
Si sientes necesidad importante de masturbarte, incluso cuando estás realizando tus actividades del día a día y debes interrumpir estas actividades para masturbarte, sería importante disminuir la frecuencia y buscar ayuda de un profesional en psicología o sexología para poder controlar esta situación.