La presencia de inflamación en una citología vaginal (Coloración de Papanicolau) puede ser considerada un hallazgo inespecífico, es decir, podría ser secundario a muchas causas entre las que incluyen infecciones, respuestas del ambiente vaginal a estímulos externos (cuerpos extraños, traumas, entre otros).
Este resultado debe ser analizado de acuerdo a los demás datos de la citología: presencia o ausencia de bacterias causantes de infección, cambios en el aspecto de las células que pueda explicar malignidad, número de células inflamatorias, aspecto del flujo vaginal etc. De esta manera se podría orientar hacia un descubrimiento normal que no representa riesgo o hacia una enfermedad susceptible de recibir un manejo específico.