Si sólo le ha sucedido esta vez y el síntoma se encuentra localizado en la mano izquierda, sin extenderse a otro lugar o acompañarse de otra sintomatología puede ser una reacción de los nervios que llegan a esa zona por falta de flujo sanguíneo adecuado o sostener una misma postura por tiempo prolongado. En cualquier caso, si este es el único hallazgo no parece indicar nada preocupante por el momento. Si empieza a ocurrir con frecuencia y en otras partes del cuerpo, debe asistir al médico general para descartar cualquier problema neurológico asociado.