Es probable que si, a pesar, de tener una terapia instaurada los síntomas persisten, la terapia que estás recibiendo no es la adecuada o requieres medicamentos tan fuertes. Recordemos que cada organismo es una entidad única y por tanto la respuesta a los medicamentos es diferente. La idea es que se logre un control con tu terapia, por lo que debes sacar una cita con un médico general, internista o reumatólogo para que se pueda llegar al control de tu patología y evitar que haya síntomas como los que tienes o que se de una progresión de la enfermedad.
Realmente es complicada la terapia para la artritis reumatoide porque las enfermedades autoinmunes son bastante fuertes y agresivas si no se logran controlar, pero para que no haya progresión debes reconsultar las veces que sea pertinente hasta que logren estabilizarte.