Este examen es el mejor para determinar si hay alteraciones en la anatomía del corazón, ya que es un método minucioso que permite evaluar con mayor detalle que una ecografía, la presencia de masas, quistes o malformaciones cardíacas en vasos del corazón, válvulas, entre otras y, que pueden producir síntomas pero que no se alcanza a divisar con claridad en el ecocardiograma. Esto con el fin de encontrar si hay una causa anatomíca que esté produciendo la arritmia que nos menciona.